viernes, 26 de abril de 2013

Posada en León: No es como lo pintan

Presentación editorial Posada en León: No es como lo pintan. 
 *** Este sábado 27 se presentará a las 7 pm y dentro de la FeNaL 2013 el libro La portentosa vida de José Guadalupe Posada, del autor Agustín Sánchez González, acompañado por el historiador leonés Mariano González Leal.
 *** Parte de la edición incluye una litografía basada en piedra original.

Bajo autorización del sello editorial Ediciones de Don Lupe, publicamos aquí el capítulo correspondiente a León. Agustín Sánchez González | 25 de Abril de 2013 (23:11 h.)


  III. En León: No es como lo pintan

Posada residió en León de 1872 a 1888, dieciséis años, y esa etapa fue fundamental en su vida pues aquí conoció a María de Jesús Vela, con quien contrajo matrimonio; en esta ciudad Juan Sabino, el único hijo de ambos, a finales de 1883; su madre falleció en esta ciudad, también, y tuvo en propiedad, por vez primera, un taller impresor, que Pedroza le vendió. La Villa de León se fundó el 20 de enero de 1576;* en 1830 el Congreso del Estado de Guanajuato le otorgó el título de ciudad y le sumó el apellido de los hermanos Juan e Ignacio Aldama, los héroes independentistas. Erigida ante la necesidad de expansión de la conquista y colonización española; tuvo una posición geopolítica privilegiada, dentro de una amplia red de caminos que cruzaban la zona del bajío, en el centro geográfico de México. Hasta el siglo XVIII continuaba siendo un enclave agrícola, pero mantenía una tradición artesanal, que habría de consolidarse hacía el siglo XIX, mostrando un auge industrial que se dio gracias a dos factores: por una parte, formó parte de los principales escenarios de la lucha independentista, por otra, un sabio guanajuatense conservador, llamado Lucas Alamán promovió la creación del Banco de Avío con el fin de fomentar la industria nacional y el jefe político de esa ciudad, Julián de Obregón, se sumó a este proceso. La ciudad recibió un gran impulso que la convirtió en la ciudad más importante del estado de Guanajuato. Ya en 1838, por ejemplo, el negocio de tenerías ocupaba a gran parte de la población. No olvidemos, tampoco, que esta ciudad ha sido considerada la capital mundial del calzado. El arribo del joven Lupe Uno de los mitos acerca de Posada es que llegó a la ciudad guanajuatense por motivos políticos que no fue real, como ya vimos en el capitulo anterior. León siempre había sido una ciudad de paso, de emigrantes; en el siglo XIX mantenía un impresionante crecimiento industrial, Pedroza lo supo desde el tiempo que vivió ahí, antes de la intervención francesa y por ello decidió mudarse a esa ciudad en el primer trimestre de 1872 y llevarse como ayudante al joven Lupe, que para entonces tenía veinte años. La vida de Posada en León ha sido poco atendida no obstante que su formación profesional se consolida en esta ciudad pues aquí vivió más de quince años, hasta 1888 aproximadamente. Pedroza instala su taller en la calle Indio Triste (hoy Gante); Posada realizó las siguientes tarjetas de presentación: TRINIDAD PEDROZA Tiene la honra de avisar a Usted que ha establecido En esta Ciudad su Litografía e Imprenta, y se ofrece A sus órdenes en la 1ª. Calle del Indio No. 14. León, mayo 15 de 1872. El taller estaba compuesto por “una prensa de mano fabricada por la casa R. Hoe & Co. De Nueva York llevada a Aguascalientes por don José María Chávez en 1855; contaba el taller además con dos rodillos entintadores y media docena de piedras litográficas. Las impresiones hechas en ese taller que se conocen tienen las medidas de 34 por 43 centímetros, quizás el máximo que podría admitir la prensa”, escribe Rafael Carrillo. * Curiosa coincidencia, en ese mismo día, 20 de enero, en 1913, don Lupe habría de morir.

La portentosa vida de José Guadalupe Posada

Libro de aportes historiográficos que amplía la visión sobre la vida del artista


** Texto del historiador e investigador Agustín Sánchez, del Centro Nacional de Investigación, Documentación e Información de Artes Plásticas.


 Son muchos los puntos de vista imprecisos que existen sobre la vida de José Guadalupe Posada, por lo que me parece pertinente difundir los estudios sobre el artista y grabador, trabajos que documentan hechos como que en verdad murió en condiciones lamentables, víctima del alcoholismo, pero también que su producción es abundante y no sólo se dedicaba a hacer calaveras, dijo el historiador e investigador Agustín Sánchez. En el Museo Nacional de la Estampa se presentó el libro La portentosa vida de José Guadalupe Posada, de Agustín Sánchez, quien desarrolla su trabajo en el Centro Nacional de Investigación, Documentación e Información de Artes Plásticas (Cenidiap), con la presencia de Octavio Fernández Barrios, director de esta instancia y Lilia Prado Canchola, curadora de la institución.

El texto contiene aportes historiográficos sobre la vida del grabador, a quien este año se le rinde un homenaje por el centenario de su fallecimiento; narra la vida del grabador desde su humilde origen en Aguascalientes, su estancia en los talleres Venegas Arroyo y su trágico final. “En su época, las calaveras se imprimían sólo en el mes de noviembre, es decir, como hacemos en la actualidad que sólo en ese mes comemos pan de muerto; el resto del año se dedicaba a hacer otras cosas que iban desde impresos promocionales, hasta colaboraciones en periódicos con caricaturas, la mayoría de ellas de corte político”, refirió el investigador del Cenidiap.

Agustín Sánchez explicó que el título del libro, La portentosa vida de José Guadalupe Posada, es la paráfrasis de una novela editada en el siglo XVII, La portentosa vida de la muerte, de Joaquín Bolaños, quien narra de manera juguetona cómo podría ser la existencia de la Muerte, desde su nacimiento. El investigador del Cenidiap consideró que Posada hizo algo parecido con sus grabados de la calavera, personaje que lo ubicó en distintos contextos cotidianos, con lo cual creó un reflejo de la vida en la época que le tocó vivir, mientras que con el resto de su producción abordó temas diversos. Posada nos ofrece cada vez más datos sobre aquellos años, con su particular forma de humor y crítica, pero sobre todo, podemos dimensionar la clase de artista que era, a pesar de que en su momento nadie lo tomó en cuenta, lo cual es una verdadera lástima porque no existen entrevistas con él ni nada que nos dé una idea de cómo era su personalidad, destacó el también autor del libro Los Burrón en familia, editado por Conaculta.

“Pero también y por fortuna –señaló el historiador e investigador– cada vez aparecen más de sus grabados e impresos, que son a fin de cuentas el legado más valioso que nos dejó, pues sólo en los periódicos tenemos el dato de que fueron 70 los diarios en los que participó, además de otras muchas colaboraciones muy interesantes de trabajos promocionales para diversos productos y servicios, pues recordemos que éste es el único recurso con que contaban para hacer este tipo de trabajos”. La portentosa vida de José Guadalupe Posada, de Agustín Sánchez, es una edición de autor que se puede conseguir a través de la página de Facebook del autor; ésta es la primera obra de Ediciones Don Lupe, está acompañado de un grabado llamado Corrido: deportados al Valle Nacional, que fue publicado originalmente en 1930.

jueves, 25 de abril de 2013

La portentosa vida de José Guadalupe Posada, un libro de aportes historiográficos que amplía la visión sobra la vida del artista

-El texto es del historiador e investigador Agustín Sánchez, del Centro Nacional de Investigación, Documentación e Información de Artes Plásticas (Cenidiap) 2013 / 04 / 25 Ciudad de México//Redacción Son muchos los puntos de vista imprecisos que existen sobre la vida de José Guadalupe Posada, por lo que me parece pertinente difundir los estudios sobre el artista y grabador, trabajos que documentan hechos como que en verdad murió en condiciones lamentables, víctima del alcoholismo, pero también que su producción es abundante y no sólo se dedicaba a hacer calaveras, dijo el historiador e investigador Agustín Sánchez. En el Museo Nacional de la Estampa se presentó el libro La portentosa vida de José Guadalupe Posada, de Agustín Sánchez, quien desarrolla su trabajo en el Centro Nacional de Investigación, Documentación e Información de Artes Plásticas (Cenidiap), con la presencia de Octavio Fernández Barrios, director de esta instancia y Lilia Prado Canchola, curadora de la institución. El texto contiene aportes historiográficos sobre la vida del grabador, a quien este año se le rinde un homenaje por el centenario de su fallecimiento; narra la vida del grabador desde su humilde origen en Aguascalientes, su estancia en los talleres Venegas Arroyo y su trágico final. “En su época, las calaveras se imprimían sólo en el mes de noviembre, es decir, como hacemos en la actualidad que sólo en ese mes comemos pan de muerto; el resto del año se dedicaba a hacer otras cosas que iban desde impresos promocionales, hasta colaboraciones en periódicos con caricaturas, la mayoría de ellas de corte político”, refirió el investigador del Cenidiap. Agustín Sánchez explicó que el título del libro, La portentosa vida de José Guadalupe Posada, es la paráfrasis de una novela editada en el siglo XVII, La portentosa vida de la muerte, de Joaquín Bolaños, quien narra de manera juguetona cómo podría ser la existencia de la Muerte, desde su nacimiento. El investigador del CENIDIAP consideró que Posada hizo algo parecido con sus grabados de la calavera, personaje que lo ubicó en distintos contextos cotidianos, con lo cual creó un reflejo de la vida en la época que le tocó vivir, mientras que con el resto de su producción abordó temas diversos. Posada nos ofrece cada vez más datos sobre aquellos años, con su particular forma de humor y crítica, pero sobre todo, podemos dimensionar la clase de artista que era, a pesar de que en su momento nadie lo tomó en cuenta, lo cual es una verdadera lástima porque no existen entrevistas con él ni nada que nos dé una idea de cómo era su personalidad, destacó el también autor del libro Los Burrón en familia, editado por Conaculta. “Pero también y por fortuna –señaló el historiador e investigador– cada vez aparecen más de sus grabados e impresos, que son a fin de cuentas el legado más valioso que nos dejó, pues sólo en los periódicos tenemos el dato de fueron 70 los diarios en los que participó, además de otras muchas colaboraciones muy interesantes de trabajos promocionales para diversos productos y servicios, pues recordemos que este el único recurso con que contaban para hacer este tipo de trabajos”. La portentosa vida de José Guadalupe Posada, de Agustín Sánchez, es una edición de autor que se puede conseguir a través de la página de Facebook del autor; esta es la primera obra de Ediciones Don Lupe, está acompañado de un grabado llamado Corrido: deportados al Valle Nacional, que fue publicado originalmente en 1930.

Redescubre Agustín Sánchez a José Guadalupe Posada

Redescubre Agustín Sánchez a José Guadalupe Posada Notimex | Cultura | Fecha: 2013-04-25 | Hora de creación: 10:39:59 | Ultima modificación: 10:39:59 Foto: Notimex/Archivo Como parte del Homenaje nacional que se rinde a José Guadalupe Posada (1852-1913), en su centenario luctuoso, se presentó el libro "La portentosa vida de José Guadalupe Posada", del escritor y curador Agustín Sánchez González, anoche en el Museo de la Estampa. Sánchez González comentó que la obra es la reedición de un libro que había publicado en Planeta con el título de "Posada", después se agotó y la editorial no lo reeditó, entonces decidió pedir los derechos y regresarlo. "Este libro es parte de un proyecto mucho más complejo, porque es una obra que, digamos, es un parteaguas en la historia de Posada, porque por primera vez se rescata y se cuestionan muchas cosas del grabador", aseguró el también historiador. Agregó que primero busca mostrar que Posada es más allá de la Catrina y que las calaveras solamente las hacía en noviembre, pues regularmente no las hacía, la otra parte importante es que se rescata parte de la historia del hijo de Posada, de Juan Sabino. También se abordan las historias que tienen que ver con el vínculo con Irineo Paz, quien fue el abuelo de Octavio Paz, Premio Nobel de Literatura 1990. Otra parte de la vida de Posada fue la presencia que tuvo en más de 70 periódicos donde participó. "Entonces este libro es una parte importante donde hay una serie de modificaciones en torno a la vida de Posada", afirmó. Octavio Fernández Barrio, director del espacio museístico, comentó que es un libro muy importante y significativo dentro de la historiografía, pues es un gran texto. "En verdad es un gran gusto presentarlo, pues es un libro muy bien escrito, un texto maravilloso y de fácil lectura, que el público lector podrá digerir con facilidad", señaló. Destacó que es interesante el planteamiento que hizo Sánchez González y que finalmente cierra el libro con una frase que "me parece maravillosa y que dice: Posada nace el día que nace Don Lupe". La obra es publicada por Ediciones Don Lupe, que buscará publicar libros acerca de humor gráfico y una revista de arte y caricatura a partir de 2014, con la idea de promover y difundir el humor mexicano, especialmente de quien fue considerado el precursor del movimiento nacionalista de las artes gráficas: José Guadalupe Posada.

Redescubre Agustín Sánchez a José Guadalupe Posada

México, DF. Como parte del Homenaje nacional que se rinde a José Guadalupe Posada (1852-1913), en su centenario luctuoso, se presentó el libro "La portentosa vida de José Guadalupe Posada", del escritor y curador Agustín Sánchez González, anoche en el Museo de la Estampa. Sánchez González comentó que la obra es la reedición de un libro que había publicado en Planeta con el título de "Posada", después se agotó y la editorial no lo reeditó, entonces decidió pedir los derechos y regresarlo. "Este libro es parte de un proyecto mucho más complejo, porque es una obra que, digamos, es un parteaguas en la historia de Posada, porque por primera vez se rescata y se cuestionan muchas cosas del grabador", aseguró el también historiador. Agregó que primero busca mostrar que Posada es más allá de la Catrina y que las calaveras solamente las hacía en noviembre, pues regularmente no las hacía, la otra parte importante es que se rescata parte de la historia del hijo de Posada, de Juan Sabino. También se abordan las historias que tienen que ver con el vínculo con Irineo Paz, quien fue el abuelo de Octavio Paz, Premio Nobel de Literatura 1990. Otra parte de la vida de Posada fue la presencia que tuvo en más de 70 periódicos donde participó. "Entonces este libro es una parte importante donde hay una serie de modificaciones en torno a la vida de Posada", afirmó. Octavio Fernández Barrio, director del espacio museístico, comentó que es un libro muy importante y significativo dentro de la historiografía, pues es un gran texto. "En verdad es un gran gusto presentarlo, pues es un libro muy bien escrito, un texto maravilloso y de fácil lectura, que el público lector podrá digerir con facilidad", señaló. Destacó que es interesante el planteamiento que hizo Sánchez González y que finalmente cierra el libro con una frase que "me parece maravillosa y que dice: Posada nace el día que nace Don Lupe". La obra es publicada por Ediciones Don Lupe, que buscará publicar libros acerca de humor gráfico y una revista de arte y caricatura a partir de 2014, con la idea de promover y difundir el humor mexicano, especialmente de quien fue considerado el precursor del movimiento nacionalista de las artes gráficas: José Guadalupe Posada.

Redescubre Agustín Sánchez a José Guadalupe Posada

Escrito por NTMX en Abril 25, 2013 - 08:56 (CDT) México, 25 Abr. - Como parte del Homenaje nacional que se rinde a José Guadalupe Posada (1852-1913), en su centenario luctuoso, se presentó el libro “La portentosa vida de José Guadalupe Posada”, del escritor y curador Agustín Sánchez González, anoche en el Museo de la Estampa. Sánchez González comentó que la obra es la reedición de un libro que había publicado en Planeta con el título de “Posada”, después se agotó y la editorial no lo reeditó, entonces decidió pedir los derechos y regresarlo. “Este libro es parte de un proyecto mucho más complejo, porque es una obra que, digamos, es un parteaguas en la historia de Posada, porque por primera vez se rescata y se cuestionan muchas cosas del grabador”, aseguró el también historiador. Agregó que primero busca mostrar que Posada es más allá de la Catrina y que las calaveras solamente las hacía en noviembre, pues regularmente no las hacía, la otra parte importante es que se rescata parte de la historia del hijo de Posada, de Juan Sabino. También se abordan las historias que tienen que ver con el vínculo con Irineo Paz, quien fue el abuelo de Octavio Paz, Premio Nobel de Literatura 1990. Otra parte de la vida de Posada fue la presencia que tuvo en más de 70 periódicos donde participó. “Entonces este libro es una parte importante donde hay una serie de modificaciones en torno a la vida de Posada”, afirmó. Octavio Fernández Barrio, director del espacio museístico, comentó que es un libro muy importante y significativo dentro de la historiografía, pues es un gran texto. “En verdad es un gran gusto presentarlo, pues es un libro muy bien escrito, un texto maravilloso y de fácil lectura, que el público lector podrá digerir con facilidad”, señaló. Destacó que es interesante el planteamiento que hizo Sánchez González y que finalmente cierra el libro con una frase que “me parece maravillosa y que dice: Posada nace el día que nace Don Lupe”. La obra es publicada por Ediciones Don Lupe, que buscará publicar libros acerca de humor gráfico y una revista de arte y caricatura a partir de 2014, con la idea de promover y difundir el humor mexicano, especialmente de quien fue considerado el precursor del movimiento nacionalista de las artes gráficas: José Guadalupe Posada

miércoles, 10 de abril de 2013

Primer capitulo del libro LA PORTENTOSA VIDA DE JOSE GUADALUPE POSADA

Primer capitulo SE MUERE DON LUPE Toda la noche ha vomitado sin parar. La oscura habitación tiene un olor nauseabundo pues la diarrea no se detiene con el atole de arroz, ni con tés de menta o de ruda, ni con ningún otro remedio de las vecinas. A temprana hora Juan y Manuel han ido a buscar un doctor. De cualquier manera, los dos amigos de parranda saben que ya todo es inútil. Don Lupe se acaba. Lleva muchas semanas metiéndole al trago. Su rostro está más que demacrado y la deshidratación por la cagalera es más que obvia. Hay colillas de cigarro forjado tiradas por doquier. Danzan calaveras a su alrededor, los sueños se convierten en pesadilla. Parece una película que se regresa al principio para repasar toda su vida, un viaje a la semilla. En quince días cumpliría 61 años, veintidós mil doscientos días. Alrededor del petate donde se retuerce de dolor zapatean monstruos fantásticos, bocas con labios rojos que enseñan unos agresivos dientes listos para devorarlo, cuerpos con formas demoníacas, diablos, brujas, gritos lastimeros de la llorona, naguales, fantasmas. El jolgorio empezó el día de su santo, el día de la Virgencita, el 12 de diciembre, cuando la ciudad, el país, el vecindario conmemoró la aparición del indio Juan Diego; siguieron las nueve jornadas de los santos peregrinos, continuó en la Noche Buena, la Navidad y celebró el fin del año 1912. Nacía uno nuevo, justo cuando la vida, su vida, se le apagaba. Todo le duele, pero es el alma la que le hace insoportable la existencia. La ruda hierba, la ruda vida. Cientos de cuartos componen la enorme vecindad ubicada a las orillas de la ciudad de México: es el barrio de Tepito, en la calle de la Paz. Son trescientos miserables cuartuchos, con más de mil almas que andan en la pena y en la pepena. Cada uno de esos cuchitriles apenas mide tres por tres metros. Los excusados son colectivos, conformados por una larga fila sin puerta y un olor repugnante; afuera una pileta de agua que a veces, con un cubo, se usa para el excusado. Y de los tendederos, que parecen telarañas, cuelgan modestas ropas. El otrora hombre regordete, ahora de cuerpo flácido y demacrado, parece mirar bailar las calaveras que dibujó hace muchos años, a los diablitos sonrientes, complacidos por su travesura, felices porque recibirán muy pronto a un huésped de lujo, su retratista favorito: don Lupe. Una vecina le llevó una cazuelita con caldo de gallina y lo encontró llorando, lamentando no poder cerrar los ojos de su Juan Sabino, en ese treceavo aniversario de su muerte. “¡Don Lupe se muere!”, es el clamor en los lavaderos esa mañana fría de domingo. Él rememora los últimos días de su vida en el barrio de Tepito, a donde llegó cuando la ciudad lo fue expulsando, primero de Santa Teresa, luego de Santa Inés, más tarde del Cuadrante de Santa Catarina, para llegar a la calle del Carmen y terminar en este sitio donde viven hombres y mujeres que sobreviven en situaciones precarias. Don Lupe sueña, como todos los días de su vida, pero hoy esos sueños se han tornado en pesadilla, como muchas otras noches más, como casi todas sus últimas noches, como todos sus últimos años.

lunes, 8 de abril de 2013

Posada le da vida a nueva editorial

Con la publicación de La portentosa vida de José Guadalupe Posada, el escritor y periodista Agustín Sánchez González anunció la creación de la casa editora Ediciones Don Lupe. Se trata de una editorial que busca publicar una revista de arte con periodicidad semestral dedicada al humorismo gráfico. El investigador dijo que el objetivo es promover y difundir el humor mexicano, especialmente de quien fue considerado el precursor del movimiento nacionalista de las artes gráficas: José Guadalupe Posada. El lanzamiento inicia con la obra mencionada y el segundo volumen que aparecerá en junio, será una monografía de José Guadalupe Posada a cargo de Antonio Robles, un escritor que llegó a México exiliado y es autor de diversas obras infantiles como Azulita rompe tacones. En el marco de los 161 años del natalicio de Posada, el pasado 2 de febrero, Sánchez González, biógrafo de Posada, señaló que hasta hoy no existen revistas que retomen y hablen sobre la caricatura. La portentosa vida de José Guadalupe Posada toma su nombre de una novela del siglo XVII titulada La portentosa vida de la muerte, escrita por Joaquín Bolaños que es antecedente importante de cómo vive la muerte. Para Sánchez González, uno de los más importantes historiadores de la caricatura mexicana, la novela viene acompañada de 11 grabados y es el antecedente en la obra de Posada. Explicó que La portentosa vida de José Guadalupe Posada es una nueva edición de Posada, editada por Planeta hace cuatro años, misma que se agotó y no volvió a reeditarse. El libro “salió publicado con el nombre de Posada, se terminó y no se volvió a editar; le puse ese nombre tomando como antecedente la obra de Joaquín Bolaños quien planteaba darle vida a la muerte. Lo que hace Bolaños es retomar toda esta historia de la muerte como una forma de vida y donde la muerte juega, vive, hace cosas y de alguna manera, es lo mismo que hace Posada medio siglo después”, señaló Agustín Sánchez. En esta primera obra de Ediciones Don Lupe, el autor narra la vida del artista desde su humilde origen en Aguascalientes, su estancia en los talleres Vanegas Arroyo y su final trágico. “Comienza con la muerte de Posada en Tepito, cuenta cómo terminaron sus días; continúa con descubrimientos y cuestionando toda la información dada a conocer respecto que solo era empleado de Vanegas Arroyo. Además, se muestra la gente con la que trabajó y se habla de su relación con Juan Sabino y de la invención de La Catrina”, concluyó Sánchez González

Un largo recorrido por la vida personal y profesional de Posada

Un largo recorrido por la vida personal y profesional de Posada El investigador Agustín Sánchez reedita un libro biográfico del grabador e ilustrador que hoy será presentado OBRA. La edición normal cuesta $160 y la que tiene la estampa $400 . (Foto: CORTESÍA AGUSTÍN SÁNCHEZ ) Con el nombre de Posada, hace cinco años editorial Planeta publicó un libro del investigador Agustín Sánchez González que contenía una biografía del grabador e ilustrador, a quien este 2013 se recuerda en el centenario de su fallecimiento. Bajo el nombre de La portentosa vida de José Guadalupe Posada, Ediciones de Don Lupe reedita aquella obra, esta vez con un tiraje de mil ejemplares y una edición exclusiva acompañada de un grabado realizado con una plancha original de Posada, impreso por el maestro Alejandro Alvarado Carreño, con 100 ejemplares numerados. Esta reedición, que publica el mismo Agustín Sánchez, periodista, historiador e investigador de la historia de la caricatura, será presentada hoy en la Casa de la Cultura Jesús Reyes Heroles, de Coyoacán, a las 19 horas, con los comentarios de Víctor Ronquillo y Humberto Musacchio, además del autor. El libro Posada no volvió a editarse después de aquella primera edición, cuenta Sánchez González, a pesar de que era un título que a menudo le solicitaban; fue por ello que el propio autor pidió a la editorial que le regresaran los derechos para volver a lanzarlo, esta vez, bajo un sello independiente con el cual Sánchez González idea desarrollar diversos proyectos en torno a Posada, y acerca de la caricatura en el país. “Sigue haciendo falta la gran biografía acerca de José Guadalupe Posada; eso a lo mejor requiere un equipo amplio”, explica Sánchez, quien en todo caso en su libro sintetiza en forma de crónica literaria y periodística el recorrido de Posada, su vida personal y profesional, su estancia en Aguascalientes -donde nació en 1852-, el desarrollo de su obra en León y su vida en el DF, donde estuvo alrededor de 25 años, hasta su muerte el 20 de enero de 1913. Más proyectos Agustín Sánchez no deja de sorprenderse del auge e interés que el público tiene por la obra de Posada; de eso da cuenta el número de visitas que recibe una cuenta que creó con el nombre del caricaturista en Facebook (José Guadalupe Posada Aguilar) o el interés que en otros países despierta. Así, uno los proyectos se llevará a Cali, Colombia, y abordará el tema de Posada y el circo, en torno del cual se considera editar un libro bajo el sello Don Lupe. Con la editorial, Sánchez planea crear una revista de arte dedicada a la caricatura, que abunde no sólo en lo político y periodístico, sino en el arte y al estética. Otro de los libros que editará llevará un texto del escritor español Antonio Robles, que aborda la obra de Posada, y del cual ya tiene los derechos. “Los estudios de la caricatura en el país están en pañales, en parte es porque los propios caricaturistas no valoran su trabajo, no llevan archivos... el propio Posada no era alguien que guardara sus trabajos. Además, sucede que la academia ha menospreciado la caricatura, de ahí la ridícula frase de que es un ‘arte menor’”, comenta Agustín Sánchez, quien ha sido también curador de algunas de las exposiciones conmemorativas acerca de Guadalupe Posada, como la que exhibió el Museo de Historia Mexicana en Monterrey. El historiador es también autor del libro José Guadalupe Posada, un artista en blanco y negro, que en 1997 publicó Conaculta, y que lleva ya cuatro ediciones, la última de éstas de 8 mil ejemplares. En el libro que ahora reedita, y que presentará el viernes, retoma las primeras épocas de trabajo de Posada, su origen, la idea de que muchos momentos de su vida estuvieron marcados por la tragedia, la influencia de su hermano Cirilo, la etapa de León, donde conoció a la que sería su esposa y tuvieron un hijo, y su trabajo en la ciudad de México, con periódicos y talleres de Irineo Paz o de Vanegas Arroyo. “El libro rompe varias ideas, porque todavía hoy hay descubrimientos. Rompe con la idea de que Manuel Manilla es su mentor, creo que también se ha sobredimensionado el papel que tuvo en su vida Vanegas Arroyo”. La portentosa vida de José Guadalupe Posada cuesta 160 pesos, y la edición con la estampa cuesta 400 pesos